La selva cede paso al concreto en Bahía de Banderas, donde un desarrollo turístico restringe el acceso a la playa Malpaso y bloquea el histórico camino que une Sayulita y San Pancho. Mientras la tala avanza, la comunidad levanta la voz para exigir respeto a la naturaleza y a los senderos ancestrales.
El proyecto en cuestión es el desarrollo turístico Belmond, actualmente en ejecución sobre terrenos colindantes con Malpaso. Según denuncias de habitantes y organizaciones locales, la obra ha privatizado el acceso a la playa y está eliminando tramos importantes de selva, afectando tanto al ecosistema como al libre tránsito entre las comunidades costeras.

Hace poco más de un mes, representantes comunitarios se reunieron con los desarrolladores para expresar su preocupaciones y sugerencias, entre ellas, mantener los accesos públicos a la playa y conservar los senderos históricos como parte del diseño integral del proyecto.
“Lamentablemente, hace unos días se cerraron todos los accesos a la playa Malpaso y caminos de senderismo, bloqueando también el paso a los servicios de emergencias, guardavidas, y Protección Civil, afectando gravemente a la comunidad local, al medio ambiente y a la economía regional”, destacan colectivos a través de un comunicado.
Uno de los senderos más importantes afectados es el camino sacacosechas, una ruta con más de 100 años de historia, utilizada desde generaciones atrás por los Wixarikas, pescadores, recolectores de coco, y actualmente por turistas, atletas, residentes y servicios de emergencia como Protección Civil.

Por ello, tanto ciudadanos del Pueblo Mágico de Sayulita, como los colectivos SerSuVoz A.C., Grupo Pro Sayulita, Azul Sayu, Mi Sayulita A.C., Mujeres Unidas Por Bahía De Banderas, Colectivo Playas Libres, Alianza De La Costa Verde, Campamento Tortuguero Sayulita, Grupo Ecológico De La costa Verde y Senderos Al Mar solicitan la intervención de las autoridades locales, estatales y federales para que se respete esta zona y se garantice el libre acceso a la playa.
“Sabemos que la ley exige a los desarrolladores donar el 10 por ciento de su terreno al municipio en forma de áreas verdes u otros espacios de beneficio público. Por eso solicitamos que ese 10 por ciento se destine específicamente a La conservación y apertura permanente del acceso a playa Malpaso.

La protección y señalización del sendero histórico camino sacacosechas como ruta ecológica, cultural y turística. Que se oficialicen estas áreas de donación para la integración de estos espacios comunitarios con acceso libre, seguro y reglamentado”, detallan.
Estos caminos -añaden- no solo son parte de nuestra historia, sino también de nuestro presente económico. Su cierre violenta el derecho de la comunidad al acceso a espacios públicos y representa una ruptura con los acuerdos previamente discutidos.
«Esta propuesta ofrece una solución legal, sustentable y armónica entre desarrollo e identidad comunitaria», expresaron.
Con información de Agencia Jafrico.