Bahía Magazine Destinos / PUERTO VALLARTA.- La organización de bodas es un gran negocio para Puerto Vallarta que se apoya en una amplia cadena de valor que proporciona lo que se requiere para un enlace matrimonial, es por ello que la Oficina de Visitantes y Convenciones (OCV) apoyó el proceso de certificación de 38 nuevos expertos en bodas destino, que culminaron un curso de 12 horas al término del cual se les otorgaron sus respectivos certificados.
El director de la OCV, Miguel Andrés Hernández Arteaga, expuso que esa oficina tiene un capítulo para la Profesionalización y Certificación de Destino, con el objetivo de llevar a la cadena de valor a tener mejores técnicas y estrategias de ventas para lograr más negocios y elevar sus ventas con mejores experiencias para cada caso.
La realización de bodas hoy por hoy refleja un 23 por ciento de la ocupación global de Puerto Vallarta en todo el año, con un promedio de gasto por evento de 250 mil pesos mientras que la norteamericana tiene el gasto de 25 mil dólares, reveló Hernández Arteaga.
“Las ganancias del sector a nivel nacional ascienden a 226 mil millones de dólares, que no se quedan en un solo proveedor sino distribuido en la cadena de valor”.
Dio a conocer que esta es la segunda vez que se realiza en Puerto Vallarta el Destination Wedding Certification con el apoyo de la Secretaría de Turismo federal y el Consejo de Promoción Turística de México.
Puerto Vallarta, en los primeros lugares
Cifras de la Sectur indican que Puerto Vallarta está en los primeros cuatro destinos donde se organizan bodas, junto a Los Cabos, Cancún y San Miguel de Allende, segmento que registra un crecimiento del 12 por ciento anual.
“La idea es continuar con estos ejercicios en diferentes sectores, para profesionalizarlos y sacarles una mejor ventaja; la siguiente certificación será en marzo, dirigida al sector LGBT enfocado al área de Romance”.
Sobre la importancia de las certificaciones en el sector, el directivo comentó que la mayoría de los canales con los que se trabaja son norteamericanos y ellos confían mucho en las certificaciones, en los sellos, afiliaciones y empresas certificadoras que avalan la experiencia de la marca.
“Aquí hay representantes de marcas con más de 20 años de experiencia y que pueden organizar más de 200 bodas por año, pero para tener mejor retorno de inversión, tarifas y ganancias se han venido profesionalizando”.
En este caso, señaló, la mayoría de los participantes están en la cadena de valor, participaron diseñadores de modas, floristas, organizadores, coordinadores, hoteleros, empresas de actividades con énfasis en bodas y todos de una u otra manera son directores, propietarios o quienes toman decisiones todos los días.
El proceso inició con la acreditación de la experiencia, relató, después hubo un proceso de evaluación y capacitación más el curso de 12 horas en el que se vieron temas legislativos, fiscales, contractuales, comerciales y de tendencias, que va apoyado del ejercicio estadístico y analítico, para que ellos aporten información a través de Datatur.
